Problemas Del Embarazo

1-) INSOMNIO DURANTE EL EMBARAZO:

 El insomnio y los trastornos en el sueño son uno de los problemas más frecuente entre las embarazadas. Según un estudio de la Asociación Americana del Sueño, entre un 66% y un 94% de mujeres padece trastornos de sueño a lo largo de su embarazo. Se dan sobretodo durante el primer trimestre del embarazo,  mientras que en el segundo tienden a normalizarse, aunque un 19% de las gestantes seguirá experimentando esta molestia.

Sin embargo, desde el punto de vista del sueño y del descanso, el tercer trimestre es el más complicado, ya que la mujer embarazada necesita levantarse entre 3 y 5 veces por la noche para ir a orinar, y muchas veces no logra conciliar el sueño. Esto se debe a la mayor presión que ejerce el útero sobre la vejiga, que además de reducir la capacidad de la vejiga, aumenta la posibilidad de sufrir reflujo gastroesofágico, molestias abdominales, calambres en las piernas y dolor de espalda.


2-) ABORTO ESPONTANEO:

 El aborto espontáneo es la pérdida del embarazo antes de las 20 semanas, mucho antes de que el feto esté en condiciones de sobrevivir fuera del útero materno. Cerca del 10 al 15 por ciento de los embarazos reconocidos termina en un aborto espontáneo. Hasta el 40 por ciento de los embarazos puede terminar de esta manera ya que muchas pérdidas ocurren antes de que la mujer se dé cuenta de que está embarazada.


¿Por qué ocurren los abortos espontáneos?
No se conocen bien las causas que provocan los abortos espontáneos. Sin embargo, la mayoría de ellos ocurre cuando un embarazo no se está desarrollando normalmente y, por lo general, no hay nada que la mujer o su médico puedan hacer para impedirlo.
La mayoría de los abortos espontáneos tiene lugar durante el primer trimestre, es decir, durante las primeras 13 semanas de embarazo. En muchos casos se desconoce la causa. Sin embargo, hay varios factores que pueden contribuir al aborto espontáneo durante el primer trimestre:
  • Anomalía cromosómica en el feto. Más del 50 por ciento de los abortos espontáneos que tienen lugar durante el primer trimestre se originan en problemas cromosómicos del feto. Los cromosomas son las estructuras celulares diminutas con forma de filamento donde se encuentran nuestros genes. Cada persona tiene 23 pares de cromosomas, o 46 en total. Un cromosoma de cada par proviene del padre y el otro de la madre. La mayoría de las anomalías cromosómicas es resultado de un óvulo o espermatozoide defectuoso que tiene cromosomas de más o de menos. El embrión resultante tiene una cantidad incorrecta de cromosomas, lo que suele llevar a un aborto espontáneo. Las anomalías cromosómicas se vuelven más comunes a medida que aumenta la edad, al igual que el riesgo de aborto espontáneo.
  • Cigoto detenido. El cigoto detenido es un saco de embarazo que no contiene feto alguno, ya sea porque el embrión no se formó o porque dejó de desarrollarse muy temprano. En algunos casos, es causado por anomalías cromosómicas. En las primeras semanas, la mujer puede notar que sus síntomas de embarazo han desaparecido y puede tener sangrado vaginal de color marrón oscuro. Con un ultrasonido podrá observarse que el saco de embarazo está vacío. Un cigoto detenido resultará en última instancia en un aborto espontáneo, aunque en algunos casos éste no tiene lugar hasta varias semanas más tarde.
  • Problemas de salud de la madre. Los problemas hormonales, infecciones, diabetes, enfermedad tiroidea, lupus eritematoso sistémico y otras enfermedades autoinmunes pueden aumentar el riesgo de aborto espontáneo en la primera etapa del embarazo. En algunos casos, el tratamiento de estos trastornos antes y durante el embarazo logran prevenir el aborto espontáneo.
  • Factores relacionados con el estilo de vida. Las mujeres que beben alcohol, fuman o consumen drogas ilícitas pueden correr un riesgo mayor de tener un aborto espontáneo. Un estudio reciente comprobó que las mujeres que consumen 200 miligramos o más de cafeína a diario (equivalente a una taza de café de 12 onzas aproximadamente) tienen un riesgo dos veces mayor de sufrir un aborto espontáneo que las mujeres que no consumen cafeína. March of Dimes recomienda a las mujeres embarazadas o que están intentando quedar embarazadas no consumir más de 200 miligramos de cafeína a diario.
El aborto espontáneo durante el segundo trimestre es menos común y se da en el uno al cinco por ciento de los embarazos entre las semanas 13 y 19. Estas pérdidas se deben a menudo a problemas en el útero o a un cuello uterino debilitado que se dilata de forma prematura. Al igual que con las pérdidas que ocurren durante el primer trimestre, las anomalías cromosómicas, las infecciones y los trastornos de salud de la madre pueden causar estas pérdidas.
 ¿Cuáles son los síntomas del aborto espontáneo?
El sangrado vaginal, a veces acompañado por dolores menstruales o dolores abdominales más fuertes, puede ser una señal de que la mujer está por tener un aborto espontáneo. No obstante, muchas mujeres experimentan manchado vaginal durante los primeros meses del embarazo y la mayoría no tiene un aborto espontáneo. La mujer debe consultar a su médico si experimenta cualquier tipo de sangrado, aunque sea leve, durante el embarazo. El médico podrá realizarle un examen interno para determinar si el cuello del útero está dilatado (señal de que es probable que se produzca un aborto espontáneo), así como un ultrasonido y análisis de sangre.
 
¿Qué tratamiento debe recibir la mujer que tiene un aborto espontáneo?
En la mayoría de los casos, no se requiere ningún tratamiento. El útero se vacía solo como si fuera una menstruación intensa. No obstante, si el ultrasonido muestra que queda tejido en el útero o si la mujer tiene hemorragias intensas, es posible que el médico le recomiende un tratamiento para vaciar el útero. Esto puede hacerse mediante un procedimiento quirúrgico llamado dilatación y curetaje (D&C), en el que se dilata el cuello uterino y se extirpa el tejido con succión o con un instrumento llamado cureta. En algunos casos el médico puede ofrecer a la mujer la opción de usar un medicamento (misoprostol) para evacuar el tejido que queda. Estudios recientes sugieren que el misoprostol es eficaz en aproximadamente el 84 por ciento de los casos.
Dado que la espera de un aborto espontáneo es traumática, los médicos suelen ofrecer a las mujeres con un cigoto detenido o un aborto espontáneo no producido (el ultrasonido muestra que el embrión ha muerto pero aún no se ha producido el aborto espontáneo) una D&C o misoprostol para vaciar el útero. Sin embargo, esperar que un aborto espontáneo se produzca de forma natural no debería perjudicar la salud de la mujer ni sus probabilidades de tener un embarazo sano más adelante. La mujer elegirá junto con su médico el método más conveniente.

¿Qué pruebas se realizan después de un aborto espontáneo?
Por lo general, los médicos no realizan ninguna prueba después de un primer aborto espontáneo durante el primer trimestre. Con frecuencia, no se conocen las causas de estos abortos espontáneos, aunque se cree que pueden deberse a anomalías cromosómicas. Cuando la mujer tiene un aborto espontáneo durante el segundo trimestre o ha tenido dos o más durante el primero, el médico suele indicar alguna de las siguientes pruebas para determinar la causa:
  • Análisis de sangre para detectar anomalías cromosómicas en ambos padres (cariotipo) y ciertos problemas hormonales y trastornos del sistema inmunológico de la madre.
  • Pruebas para detectar anomalías cromosómicas en el tejido obtenido del aborto espontáneo (en caso de contarse con él).
  • Ultrasonido del útero.
  • Histeroscopía (visualización del útero a través de un endoscopio especial que se inserta por el cuello del útero).
  • Histerosalpingografía (una radiografía del útero).
  • Biopsia endometrial (succión de un pequeño trozo de revestimiento uterino para detectar efectos hormonales).
¿Cuáles son las causas de los abortos espontáneos recurrentes?
Si bien los abortos espontáneos suelen ocurrir una sola vez, aproximadamente una de cada dos parejas experimenta dos, tres o más abortos espontáneos seguidos. En algunos casos, estas parejas tienen un problema subyacente que provoca estos abortos.
Las parejas que han sufrido dos o más abortos espontáneos deben someterse a una evaluación médica completa. Sin embargo, las pruebas sólo pueden determinar la causa de los abortos espontáneos recurrentes en no más del 50 por ciento de los casos.
Entre las causas conocidas pueden mencionarse:
  • Problemas cromosómicos. Los problemas cromosómicos sólo se producen una vez. No obstante, en aproximadamente el dos al cuatro por ciento de las parejas que tienen abortos espontáneos recurrentes, alguno de los dos es portador de una redistribución cromosómica que no afecta su propia salud pero que puede provocar redistribuciones cromosómicas en el feto. Se recomienda a ambos padres realizarse un cariotipo para determinar la presencia de estas redistribuciones cromosómicas.
  • Anomalías uterinas. Las anomalías del útero causan entre el 10 y el 15 por ciento de los abortos espontáneos recurrentes. Estas pérdidas del embarazo pueden ocurrir en el primer o el segundo trimestre. Algunas mujeres nacen con un útero cuya forma es anormal o que se encuentra dividido de forma parcial o completa. Otras desarrollan tumores no cancerosos (fibroides) o tienen cicatrices en el útero debido a cirugías previas. Estas anomalías pueden limitar el espacio disponible para el feto en crecimiento o interferir con el suministro de sangre al útero. Algunas anomalías uterinas pueden corregirse mediante cirugía, lo cual incrementa las probabilidades de tener un futuro embarazo exitoso. Un cuello uterino debilitado (a veces llamado cuello incompetente) puede causar un aborto espontáneo, por lo general durante el segundo trimestre del embarazo. A veces es posible prevenir los abortos espontáneos recurrentes causados por un cuello uterino debilitado colocando una sutura a su alrededor al comienzo del siguiente embarazo. Este procedimiento se conoce como cerclaje.
  • Síndrome antifosfolípido. Este trastorno del sistema inmunológico aumenta el riesgo de formación de coágulos de sangre que pueden obstruir los vasos sanguíneos de la placenta. Los estudios sugieren que el síndrome antifosfolípido causa del cinco al 10 por ciento de los abortos espontáneos recurrentes. Este trastorno puede diagnosticarse mediante análisis de sangre. El tratamiento con dosis bajas de aspirina y heparina, un anticoagulante, hace posible el nacimiento de un bebé sano en entre el 70 y el 75 por ciento de las mujeres afectadas.
  • Causas hormonales. Cuando el organismo segrega una cantidad excesiva o insuficiente de ciertas hormonas, puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo. Algunos investigadores creen que las bajas concentraciones de la hormona progesterona, que es fundamental durante la primera etapa del embarazo, provocan entre el 25 y el 40 por ciento de las pérdidas tempranas, aunque no se ha podido comprobar. Las mujeres que tienen bajas concentraciones de progesterona durante varios ciclos menstruales seguidos, diagnosticado mediante análisis de sangre y una biopsia del endometrio, tienen lo que se conoce como defecto de la fase luteínica. Los médicos pueden recomendar un tratamiento con supositorios de progesterona natural o citrato de clomifeno. No obstante, los estudios aún no han demostrado que estos tratamientos sean eficaces. Las mujeres con síndrome de ovario poliquístico, caracterizado por anomalías hormonales y varios quistes en los ovarios, también tienen un riesgo mayor. El tratamiento con metformina, un medicamento para la diabetes, puede ayudar a reducir el riesgo.
  • Trastornos de coagulación sanguínea hereditarios (trombofilias). Este grupo de trastornos, que incluye la mutación de Leiden del factor V y mutaciones del gen de la protrombina, también puede influir en la recurrencia de las pérdidas. Los investigadores están estudiando si el tratamiento con aspirina y heparina pueden ayudar a prevenir estas pérdidas también.
  • Infecciones y otros factores. Ciertas infecciones asintomáticas del tracto genital podrían desempeñar un papel importante en los abortos espontáneos recurrentes. Sin embargo, no se recomiendan actualmente pruebas de rutina (en las mujeres que no presentan síntomas) en el caso de infecciones. La exposición de la mujer embarazada o de su pareja a ciertos disolventes industriales en el trabajo puede provocar a veces un aborto espontáneo. Se recomienda a las parejas consultar a su médico acerca de los productos químicos a los que están expuestos en sus lugares de trabajo.

3-) EMBARAZO ECTOPICO O EXTRAUTERINO: 

Si un óvulo fecundado se implanta fuera del útero, se denomina embarazo extrauterino o ectópico. Se da en uno de cada 50 embarazos.

Así es cómo sucede: después de la concepción, el óvulo fecundado desciende por la trompa de Falopio en dirección hacia el útero. Si la trompa se encuentra dañada u obstruida y no permite que el óvulo se dirija hacia el útero, éste puede implantarse en la trompa y continuar desarrollándose allí. Debido a que la mayoría de los embarazos extrauterinos tienen lugar en una de las trompas de Falopio, frecuentemente se los llama embarazos “tubáricos”.

Con mucha menos frecuencia, el óvulo se implanta en uno de los ovarios, en el cuello del útero, directamente en el abdomen o incluso en la cicatriz de una cesárea. En raras ocasiones, una mujer puede tener un embarazo normal en el útero y al mismo tiempo un embarazo extrauterino. A esto se lo llama embarazo heterotópico y es más común que suceda si te has sometido a tratamientos de fertilidad, como la fertilización in vitro.


Sígnos y síntomas

Acude enseguida a Urgencias si experimentas estos signos o síntomas (suelen aparecer una o dos semanas después de la primera falta):
• Pérdidas (hemorragias vaginales) de color negruzco.
• Dolor intenso en el bajo vientre o a un lado del abdomen (el dolor puede irradiar al hombro e, incluso, al cuello).


¿Cómo afecta el embarazo ectópico a la fertilidad?

Haber tenido un embarazo ectópico no descarta la posibilidad de un nuevo embarazo. Incluso aunque haya habido rotura de una de las trompas y haya sido necesario extirparla, el óvulo puede ser fecundado en la otra trompa antes de entrar en el útero. Si ambas trompas están dañadas o han sido extirpadas, puede recurrirse a la fecundación in vitro (FIV). Con la FIV, los óvulos maduros son fecundados en laboratorio y luego se implantan en el útero, donde se desarrollan hasta convertirse en feto.


4-) ESTRES DEL EMBARAZO:


Siempre se recomienda tranquilidad a las madres embarazadas, hay que evitar todo estres en el embarazo, algo muy sencillo de decir pero dificil de llevar a la práctica en una sociedad en la que aún hoy, el peso de la casa lo sigue llevando mayormente la mujer y que además, tiene trabajo fuera de ella,a menudo en puestos de responsabilidad que generan una gran tensión. El estres en la mujer embarazada es algo común y debe ser controlado, ya que algunos de los problemas que puede ocasionar en el embarazo son bebes de bajo peso e incluso abortos espontaneos.

Así lo indican recientes estudios, el estrés materno puede ser causa de recién nacidos de bajo peso para su edad de gestación y además, en los últimos años se ha demostrado que este estrés de las mujeres es mucho más importante durante el embarazo y que la tensión nerviosa de la madre puede relacionarse, además del bajo peso del recién nacido, con abortos espontáneos.

Está demostrado que en una madre estresada el flujo de nutrientes hacia el bebe disminuye, al alimentarse menos, ocasiona bebes de bajo peso que a su vez pueden presentar dificultades locomotrices en el futuro, es algo aritmético y que la madre debe valorar, por encima de cualquier cosa siempre ha de estar el bienestar de nuestro bebe.

Un estudio reciente con 1.000 mujeres embarazadas ha demostrado que las 55 que perdieron al bebe se sentian más estresadas, tenían niveles más altos de cortisol y más bajos de progesterona (hormona crucial para el mantenimiento de un embarazo saludable). Según este mismo estudio, algunos bebés expuestos a un alto nivel de cortisol tienen un coeficiente intelectual más bajo al año y medio de edad. Son más proclives a padecer ansiedad y miedos y a sufrir problemas de desarrollo neurológico como retrasos cognitivos, ansiedad o problemas de conducta como el síndrome de hiperactividad y déficit de atención.

Eso si, ¡no te alarmes ni te estreses por leer esto!

Las mujeres no debemos preocuparnos excesivamente por los resultados de estas investigaciones, ya que todos estos datos tan alarmantes están en relación con niveles extremos de estrés, en cualquier caso, conviene mantenerse atento a nuestro nivel de estres y controlarlo y reducirlo en la medida de la posible.


¿Como controlar el estres en el embarazo?
Cada vez es más frecuente la necesidad de una baja laboral de una embarazada sometida a estrés, con objeto de recuperar la ganancia de peso de un feto que se había estacionado en su crecimiento intrauterino.

Con un aporte nutricional adecuado, tranquilidad y reposo se consigue una mejor nutrición del feto y un mayor aporte de sangre oxigenada al territorio fetal.


5-) ANEMIA EN EL EMBARAZO:


  • Las Causan de La Anemia Son Las Siguientes:
Ingesta baja de hierro en la dieta.
Deficiencia de acido fólico.
Pérdida de sangre por hemorragia por hemorroides o gastrointestinal.
El embarazo agrava o desencadena la mayoría de estas causas generales de anemia:
Altera los procesos digestivos.
Aumenta la cantidad de sangre circulante en el organismo (de unos cinco litros en el adulto normal a siete en la embarazada, con lo que los glóbulos rojos se diluyen en ella).
El feto consume parte del acido fólico y el hierro de la madre.
  • Sintomas Mas Frecuentes De La Anemia
Algunos, como las nauseas, difíciles de distinguir de los efectos del embarazo, son:
Cansancio y debilidad, Palidez, Falta de aire a veces, Dolores de cabeza, Nauseas y Palpitaciones.

  • Factores De Riesgo:
Alimentación deficiente, carente de vitaminas y minerales, Tabaco, que reduce la absorción de nutrientes importantes, Exceso de consumo de alcohol que lleva a la desnutrición y Tomar medicación anticonvulsiva.
  • Prevencion de Una Anemia Durante El Embarazo:
Comer alimentos ricos en hierro como hígado, ternera, lentejas, cereales, huevos y frutos secos.
Comer alimentos ricos en acido fólico, como judías, harina, mantequilla de cacahuete, champiñones, brócoli ó espárragos.
Comer alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos y vegetales; la vitamina C hace que la absorción de hierro sea más eficiente.
Tomar suplementos vitamínicos y minerales, especialmente ácido fólico (ya que este es necesario para la madre) para formar los glóbulos rojos necesarios, y para el feto, ya que su carencia se relaciona con déficits en el desarrollo de su sistema nervioso.
Dada la facilidad de su prevención mediante los suplementos indicados, estos se recomiendan habitualmente en todos los protocolos de manejo de las embarazadas.



6-) PARTO PREMATURO:
El parto prematuro es el parto que tiene lugar antes de las 37 semanas de gestación. (La mayoría de los embarazos dura de 38 a 42 semanas, y la fecha del parto normal es 40 semanas después del primer día de su último período menstrual). El parto prematuro puede ocurrirle a cualquier mujer. Sólo aproximadamente la mitad de las mujeres que tienen un parto prematuro pertenece a un grupo de riesgo conocido. Cerca del 12 por ciento de los nacimientos en los Estados Unidos (1 de cada 8) son prematuros. Los bebés prematuros tienen un riesgo mayor de necesitar hospitalización, tener problemas de salud a largo plazo y morir, comparado con los bebés nacidos a término.

El parto prematuro a veces puede impedirse con una combinación de medicamentos y reposo. Cada vez es más frecuente poder demorar el parto lo suficiente para transportar a la mujer a un hospital equipado con una unidad de cuidados intensivos neonatales (NUCI, por sus siglas en inglés) y administrarle un medicamento que acelera el desarrollo de los pulmones del bebé.


Qué puede hacer usted:Llame a su médico o vaya al hospital de inmediato si cree que está por tener un parto prematuro. Algunas de las señales del parto prematuro son:


  • Contracciones que hacen que su barriga se endurezca mucho cada 10 minutos o con más frecuencia
  • Cambio en el color de su flujo vaginal, o sangrado de la vagina
  • La sensación de que su bebé está empujando hacia abajo. A esto se le llama presión pélvica.
  • Dolor débil en la parte baja de la espalda
  • Cólicos como si tuviera la regla o el período
  • Dolor de barriga con o sin diarrea.
¿Quiénes corren el riesgo de tener un parto prematuro?
Todas las mujeres embarazadas corren el riesgo. Actualmente, sólo podemos predecir aproximadamente el 50 por ciento de los partos prematuros antes de las 37 semanas de gestación. Por esta razón, es muy importante que todas las mujeres embarazadas conozcan los factores de riesgo, los síntomas de parto prematuro y qué hacer si sospechan que pueden estar teniendo un parto prematuro.

Se ha comprobado que las mujeres que tienen el riesgo más alto de tener un parto prematuro son aquellas que:

  • Ya han tenido un parto o bebé prematuro
  • Están embarazadas de mellizos o más bebés
  • Han tenido más de tres abortos o abortos espontáneos
  • Sufren mucho estrés durante el embarazo
  • Sufren maltrato físico, sexual o emocional
  • Fuman cigarrillos
  • Beben alcohol
  • Consumen drogas ilegales
  • Tienen menos de 17 años o más de 35
  • Tienen una infección en el tracto vaginal o las vías urinarias no tratada durante el embarazo
  • No aumentan suficiente peso durante el embarazo, especialmente aquellas que empiezan el embarazo con un peso normal o bajo peso
  • Tienen anormalidades uterinas, del cuello uterino o de la placenta
  • Tienen complicaciones del embarazo, como sangrado o alta presión arterial
Cómo prevenir el parto prematuro
Puede ayudar a prevenir el parto prematuro tomando conciencia de sus síntomas y siguiendo algunas instrucciones sencillas. La clave para prevenir un nacimiento prematuro es buscar ayuda médica de inmediato si tiene cualquiera de las señales del parto prematuro.

Algunos medicamentos pueden retrasar el parto si se los toma a tiempo. Los medicamentos llamados glucocorticoides, si se los administra 24 horas antes del parto, pueden ayudar a acelerar la madurez de los pulmones y del cerebro del niño, y, de esta manera, reducir algunos de los problemas de salud más graves que suelen afectar a los bebés prematuros. Estos medicamentos sólo funcionan si la mujer recibe atención médica rápidamente, por lo que es esencial saber identificar los síntomas.



7-) SANGRADO Y MANCHADO DE LA VAGINA DURANTE EL EMBARAZO:

De cada 10 mujeres embarazadas, dos o tres tienen sangrado a principios del embarazo. El sangrado no significa siempre que hay un problema, pero puede ser una señal de aborto espontáneo o de otras complicaciones graves.

Es muy importante observar el tipo de sangrado para que el profesional médico pueda decirle si es peligroso para usted o su bebé. Fíjese si el sangrado está aumentando o disminuyendo y cuántas toallas higiénicas está usando. Cuando esté sangrando, no use tampones, no se aplique duchas vaginales ni tenga relaciones sexuales.


8-) LA HIPERTENSION:
 
La hipertensión crónica es la alta presión arterial o de la sangre diagnosticada antes del embarazo, o antes de la semana 20 de embarazo. Este tipo de alta presión arterial no desaparece después de dar a luz. Los expertos médico no conocen a ciencia cierta las causas de la hipertensión crónica. Los genes, la dieta y el estilo de vida pueden contribuir a la aparición de la condición.

La hipertensión puede estrechar o tensar los vasos sanguíneos en el útero que suministran oxígeno y nutrientes al bebé. La hipertensión durante el embarazo puede crear riesgos serios para ambos la madre y el bebé, incluyendo:
Las buenas noticias es que con un cuidado prenatal adecuado los problemas serios asociados con la hipertensión crónica se pueden prevenir. De hecho, la mayoría de las mujeres con alta presión arterial tienen embarazos saludables. Sin embargo, aproximadamente 1 de cada 4 desarrolla una condición peligrosa llamada preeclampsia.

Qué puede hacer antes del embarazo
Si usted tiene hipertensión, visite a su profesional de salud antes de tratar de quedar embarazada. El le puede ayudar a controlar su presión arterial antes del embarazo. Su profesional también puede asegurarle de que los medicamentos que esté tomando sean seguros durante el embarazo o si necesita cambiar los medicamentos antes de quedar embarazada.

Antes del embarazo usted puede hacer lo siguiente:
Problemas de salud para la madre, como los ataques al corazón y derrames cerebrales
  • Colabore con su profesional de salud para bajar su presión arterial.
  • Si el bajar de peso puede ayudarle a controlar su presión arterial, usted puede hacer una dieta y ejercicio para ayudarla a llegar a su meta.
  • Tómese su medicamento para la presión arterial como prescrito.
  • Deje de fumar. El fumar puede dañar las paredes de los vasos sanguíneos. Es muy peligroso para las personas con hipertensión. El fumar también puede causar daños en su bebé.
  • Crecimiento lento en el feto y bajo peso al nacer
  • Aumento en el riesgo para el parto prematuro
  • Placenta abrupta (la separación de la placenta de la pared del útero durante el parto; esto puede causar hemorragia y shock, poniendo en peligro a la madre y al bebé).