Sintomas y Tipos De Parto

SINTOMAS DE PARTO: LAS CONTRACCIONES

Todos los partos suelen ir precedidos por algunas manifestaciones que permiten a la futura madre organizarse con tiempo suficiente. A continuación, te explicamos cuáles son las principales señales de parto premonitorias.
La contracción es debida a un endurecimiento del útero. Se inicia en su parte más alta (el fondo del útero) para extenderse después a todo el órgano. Las fibras musculares uterinas, que están dispuestas de forma longitudinal, pueden compararse con una goma, debido a su capacidad de alargarse y de contraerse.
Cuando se contraen, hacen que también se contraiga el cuello del útero, que comienza a modificarse al estar sometido a continuados y rítmicos estiramientos y contracciones.
Cada contracción se inicia, aumenta y alcanza su ápice, para después disminuir hasta desaparecer por completo. Durante el mes anterior al parto, la madre puede tener algunas contracciones, que son como un ensayo general del cuello del útero, en vistas a la dilatación necesaria para que el niño pueda pasar a través de él (unos 10 centímetros).
Pero, en realidad, las contracciones que conducen al parto poseen características muy precisas:
• Se presentan a intervalos regulares. Al principio, cada veinte minutos, después, cada cuarto de hora y, al final, cada 10 y 5 minutos. Sin embargo, sólo se deberá acudir a la clínica o al hospital cuando sean muy frecuentes.
• Son intensas y dolorosas. Cuando se presentan estos dos aspectos, conviene tener un reloj al alcance de la mano. Algunas veces, las contracciones dejan de sentirse al cabo de poco tiempo y sólo se trata de una falsa alarma. Por ello, sólo cuando hace dos horas que se repiten a intervalos de cinco-diez minutos y con una duración de 40 segundos ha llegado el momento de ir a la clínica o al hospital.

Tipos de Respiracion Para El Parto

Al realizar los cursos de preparación al parto, nos enseñan los tipos de respiración que podemos utilizar llegado el momento del parto, permitiéndonos relajarnos y ayudar al bebé, ya que respirar correctamente aumenta el aporte de oxígeno durante las contracciones.
Existen tres tipos de respiración que vamos a explicar a continuación.

Respiración abdominal o del diafragma


diafragma
No sólo las utilizan las cantantes, sino también las mamás en el momento del parto. Este tipo de respiración permite aliviar las contracciones más intensas cuando se está dilatando el cuello uterino. Para realizar esta respiración debemos:
  1. Tomar el aire por la nariz notando cómo se hincha el diafragma.
  2. Expulsar el aire por la boca contrayendo ligeramente el diafragma mientras se expulsa el aire.

Respiración costal inferior o jadeo


jadeo
Este tipo de respiración es el típico que vemos en las películas, expulsando el aire en jadeos o soplidos. Sirve para evitar pujar en las fases de dilatación y expulsión. Suele utilizarse en los partos sin epidural con el fin de no distender demasiado los músculos que rodean el periné. Cuando sí hay epidural, el deseo de empujar no suele aparecer. Este tipo de respiración se realiza en un sólo paso:
  1. Tomar aire y expulsarlo en varias veces en forma de jadeo o soplo.

Respiración en la fase de expulsión


expulsion
En la fase final del parto, se utiliza este tipo de respiración que se basa en:
  1. Realizar 2-3 inspiraciones profundas y cortas.
  2. Aguantar la respiración mientras se contraen los músculos del abdomen.
  3. Relajar los músculos y expulsar el aire.
  4. Elevar la cabeza y los músculos, pegando la barbilla al tórax y sujetar las rodillas.
TIPOS DE PARTO


Hay distintos tipos de parto en función de las necesidades de cada situación en particular y también en función de la decisión que tome la madre sobre este momento. En definitiva, existen diferentes tipos de parto según su duración, la forma en que se produzca o el lugar donde se desarrolle.

Parto Natural

El parto se produce entre la semana 38 y la 42 y no se utilizan anestesias. Se produce por causas naturales, sin necesidad de inducción.

Parto por Cesárea

Se lleva a cabo cuando el embarazo por vía vaginal (la vía natural) resulta imposible o puede poner en riesgo al bebé o la madre. Se realiza después de anestesiar a la madre y se lleva a cabo a través de un corte en el abdomen.

Parto en el agua



Su principal beneficio es que consigue relajar a la madre y hace sentir menos dolor. Este tipo de parto se ha puesto de moda en los últimos años. Según los expertos, el proceso es menos traumático para el
bebé al nacer en un medio líquido, más parecido al entorno del bebé antes de nacer. Conviene tener en cuenta que, aunque no sea un proceso largo, no se puede anestesiar a la madre y en el caso de ser urgente una cesárea, se debe realizar un traslado hasta el hospital.